El lago Toba es un gran lago de origen volcánico de 100km de largo y 30km de ancho, situado en el centro de la zona septentrional de la isla de Sumatra, en Indonesia.
En 1949 el geólogo holandés Rein van Bemmelen informó que el lago Toba estaba rodeado de una capa de rocas ignimbritas, y que en su origen fue una gran caldera volcánica. Posteriores investigadores encontraron ceniza de riolita, similar a la ignimbrita alrededor del lago Toba, en Malasia y la India, a una distancia de 3000 km. Algunos oceanógrafos descubrieron ceniza del lago Toba en el fondo del Océano Índico oriental y en el Golfo de Bengala.
La erupción del Toba ha sido fechada hace unos 73.000 ± 4.000 años. Se ha estimado un índice de explosividad volcánica de 8, lo que la convierte en el ejemplo más reciente de una erupción supervolcánica, y probablemente en la más poderosa erupción ocurrida en los últimos dos millones de años.
Los especialistas Bill Rose y Craig Chesner, de la Universidad Tecnológica de Michigan, estimaron la cantidad total de material erupcionado en unos 2.800 km³, de los cuales 2.000 km³ correspondían a ignimbritas que fluyeron sobre la superficie, mientras 800 km³ corresponden a cenizas que cayeron en su mayor parte hacia el Oeste, debido a la dirección de los vientos. Una explosión de este tipo podría haber durado unas dos semanas. La explosión originó el colapso de una gran área, creando una extensa caldera que resultó inundada, formando así el lago propiamente dicho. Posteriormente la base de la caldera emergió formando Samosir, la península situada en el centro del lago, en la actualidad una isla artificial. Este fenómeno de emersión es bastante frecuente en calderas de gran tamaño, aparentemente debido a la presión ascendente del magma no erupcionado. Samosir es probablemente la mayor caldera resurgente de la Tierra.
Muy pocas plantas y animales de Indonesia pudieron sobrevivir a la erupción, la cual podría haber causado una extinción masiva casi completa a escala planetaria. Hay algunas evidencias, basadas en el ADN mitocondrial, de que la raza humana se redujo a unos pocos miles de individuos, debido a la erupción del Toba, como señala la teoría de la catástrofe de Toba.
La Teoría de la catástrofe de TobaLa teoría de la catástrofe de Toba establece que la evolución humana fue afectada por un reciente evento de tipo volcánico. Fue propuesta por Stanley H. Ambrose, de la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign. El conocimiento sobre la prehistoria humana es en gran medida teórico, pero está basado en las evidencias obtenida de fósiles, la arqueología y las evidencias genéticas.
En los últimos tres a seis millones de años, tras la separación de los linajes de humanos y simios del tronco común de homínidos, la línea humana se ramificó en varias especies. La teoría catastrófica de Toba establece que una masiva erupción volcánica cambió el curso de la historia al producir una casi extinción de la población humana (este tipo de eventos se denomina cuello de botella de población). Cerca de 75.000 años antes de nuestra era, el supervolcán Toba, en el norte de la isla indonesia de Sumatra, explotó como una caldera con una fuerza 3.000 veces superior a la erupción del Monte Santa Helena, dejando como rastro el lago Toba.
Según Ambrose, este evento produjo una disminución de las temperaturas globales de 15°C en promedio, lo que representa un cambio drástico en el ambiente que debió producir múltiples cuellos de botella de población en varias especies humanas que debían existir en la época. Este cambio aceleró a su vez la diferenciación de las poblaciones humanas aisladas, conduciendo finalmente al fin de todas las especies humanas menos una, de la cual descienden los humanos actuales.
Una combinación de evidencias geológicas y modelos computacionales apoya la factibilidad de la teoría de la catástrofe de Toba, y la evidencia genética sugiere que todos los humanos actuales, a pesar de la aparente variedad, provienen de un mismo tronco formado por una población muy pequeña. Utilizando las tasas promedio de mutación genética, algunos genetistas han estimado que esta población humana original vivió en una época que concuerda con el evento de Toba.
Esta teoría establece que cuando el clima y otros factores fueron propicios, las humanos nuevamente se expandieron a partir de África, migrando primero al Oriente Medio, y luego a Indochina y Australia. Las rutas migratorias crearon centros de población en Uzbekistán, Afganistán e India. Las subsiguientes adaptaciones al medio produjeron los diferentes tonalidades en el color de la piel que hoy en día se observan en la población humana.
El Adán Cromosomal-YAdán cromosomal-Y habría sido un hombre africano homólogo de la Eva mitocondrial, que según la teoría genetista, correspondería en la evolución humana al ancestro humano masculino que poseeía el Cromosoma Y del cual descienden todos los cromosomas Y de la población humana actual. Por ello, Y-cromosoma Adan correspondería a un único antepasado masculino del cual converge toda la población actual de Homo sapiens (seres humanos).
Adán cromosomal-Y habría vivido hace alrededor de unos setenta mil años, y sus descendientes se habrían extendido por todo el planeta.
El Adán cromosomal-Y recibe su nombre del Adán que se relata en el libro del génesis de la Biblia. Esto ha llevado a algunos malentendidos entre el público general. Una opinión común es creer que Adam fue el único hombre viviendo en su tiempo. Sin embargo otros creen en hombres anteriores a Adán pertenecientes igualmente a aquella época, probablemente también habrían tenido descendencia hasta hoy en día. Sin embargo, solo el Adán cromosomal-Y fue quién produjo una línea completa de hijos hombre hasta el día de hoy; y es el ancestro del cual converge toda la población actual.
En la teoría originada de la genética humana, el Adán cromosomal-Y sería el varón del cual descienden todos los cromosomas Y, que determinan el sexo masculino. Un estudio biológico de la Universidad de Stanford sobre 93 polimorfismos genéticos humanos hallados en este cromosoma, en mil individuos de 21 regiones del mundo, calculó que un antepasado o grupo de antepasados masculinos comunes a todos los humanos actuales vivió en África hace unos 70.000 años. Estudios posteriores han estimado fechas anteriores para el antepasado masculino común, pero todos coiciden en que este es bastante posterior a la antepasada común, por razones que se desconocen.
Es muy importante decir que una teoría intenta aclarar que Adán cromosomal-Y no vivió en la misma época que la Eva mitocondrial. Por el contrario, la existencia de la Eva mitocondrial fue por lo menos 50 mil años antes.
La aparición del Adán cromosomal-Y se cree que estaría relacionada con la "Teoría de la catástrofe de Toba". Esta catástrofe habría probocado que el 'pool' genético de la especie humana se haya restringido de tal modo que se habría potenciado la unidad genética de la especie humana, la cual en torno al año 70.000 AC se habría reducido a sólo alrededor de 1000 individuos.
En definitiva...
el hecho de que hoy en día, no sólo existamos si no que además, estemos transformando la tierra de una forma que puede acabar con nuestra civilización y una gran parte de la fauna y flora del planeta, es toda una broma del destino.
PD: en realidad todo esto no pasó, el flying spaghetti monster ha manipulado los datos científicos con sus largos tentáculos de spaghetti.
SithWolf