Robin Hood

Deprisa y corriendo, con la emoción de haber vuelto a ir al cine (menudo carrerón!) me pongo a escribir sobre la última gran superproducción de autor, y no es ninguna contradicción, de Ridley Scott.


Los inicios de una historia sobradamente conocida

Quien no conozca las aventuras del príncipe de los ladrones es porque no ha vivido en este planeta. La historia del que robaba a los ricos para aplacar las necesidades básicas de los pobres, el gran arquero de Sherwood ha sido llevada a la pantalla en prácticamente todas sus modalidades: las pretéritas de Errol Flynn, las animadas de Disney, las aventuras de Kevin Costner o las cómicas de Mel Brooks. Incluso una serie de televisión ha llevado el sello de Robin Hood.

Sin embargo, Ridley Scott ha creído necesario explicar de nuevo tan conocida historia. Primero lo intentó comenzando un proyecto llamado Nottingham, en el que el protagonista sería el sherrif del lugar, creando un Robin más oscuro y menos noble de lo que lo conocemos. Sin embargo, a medida que Russell Crowe se incorporó al equipo tanto como actor principal como productor, la idea se fue desechando para regresar al Robin heroico.

Así pues había que hacer algo nuevo, y lo que se les ocurrió a los creadores y sobretodo al guionista fue dar una vuelta de tuerca y explicar el inicio de la leyenda, de como un tal Robin Longstride se convirtió en el mítico Robin Hood por arte de "birli birloque".


Amalgama de tonterías

Para ello, el guionista Brian Helgeland optó por mostrar su carácter liberal y para eso, creo yo después de ver la película pensó en los momentos más importantes en cuanto a libertad del mundo occidental se refiere para incluirlos en una ensalada con poco fundamento y menos sabor.

Recopilando... tenemos a Robin Hood, que en sus inicios se hace pasar por Robert Logsley, lo cual recuerda sobremanera a la película de Richard Gere Somersby. El guionista opina que eso sería genial, no veas que novedad, y que además molaría un montón que tuviera que ver con la declaración de independencia, y con el desembarco de Normandía, momentos clave de la historia de las libertades americanas. Así se inventa una especie de declaración pretérita hecha por su padre cantero, que era un filósofo... estoy totalmente seguro que los canteros de aquella época tenían acceso a un montón de libros, porque sabían leer de corrillo, y que después además los grandes nobles estaban de acuerdo con lo que escribía, porque también sabía escribir perfectamente, y lo firmaban sin problema. Para acabar, crea un desembarco de Normandía a la inversa, con los franceses llegando a plena luz del día a una playa inglesa totalmente cerrada por riscos gigantescos de doscientos metros, una fantástica zona para entrar y esperar que te caiga el ejército inglés como un martillo atizando un yunque de mar y rocas.

El guión no tiene ni pies ni cabeza. No se acaba de entender como un tipo que se hace pasar por otro, encima tiene la desfachatez de quedarse con el caballo del Rey caído sin que nadie haga pregunta alguna. O como el sheriff de Nottingham hace y deshace a placer sin que caiga la fuerza implacable del ejército del Rey, que parece que en ningún momento tiene...


Maravillosa puesta en escena y nada más

Pero la película transcurre digna, dada su búsqueda de la veracidad, aunque lo que cuenta no tenga ningún sentido. Todo es bastante aparente, hasta el momento final, con una Lady Marion enfundada en una cota de mallas y una armadura y un grupo de críos harapientos vestidos con cueros haciéndole de guardia personal.

Aún así, como digo, la puesta en escena es soberbia, aunque como siempre las escenas de batallas se vuelvan caóticas y el final haya que ventilarlo rápidamente. Tan rápidamente que no se acaban de entender cosas importantes del personaje como el hecho de que la gente acabe sabiendo el verdadero nombre del supuesto Robert Logsley o el sobrenombre que finalmente le ponen, Robin Hood. Su único valor positivo, dicho todo esto, es llevarnos a aquella época con absoluta rigurosidad, si no tenemos en cuenta los personajes. Todo lo demás pasa por ser digno a absurdo y finalmente a avergonzante.


En definitiva

No valía la pena gastarse un dineral como ese en una película que no dice nada nuevo de este genial personaje. Me da la impresión, conociendo anteriores trabajos de Ridley Scott, que habrá que esperar la edición especial y sus tropecientos minutos extra para entender y disfrutar mejor de esta historia, atropellada y anodina en su estreno en cine



Robin Hood en Imdb

1 comentarios: (+add yours?)

El Cinema de Hollywood dijo...

Coincidimos plenamente en la valoración de esta película.

Por otra parte, me parece muy acertada la nueva plantilla del blog. Felicidades por la elección.