Hay pocas cosas que me sobrecojan tanto y me produzcan esa sensación de curiosidad, pavor y estupefacción como cuando la naturaleza suelta sus riendas y nos muestra toda su fuerza descontrolada: tifones, huracanes, tornados, tormentas, volcanes, tsunamis... sólo hace falta que aunen fuerzas para provocar un espectáculo sumamente bello y aterrador y que me hace pensar en lo pequeño, fragil y futil que soy en este enorme mundo de fuerzas titánicas.
En la tarde del miercoles 30 de abril, en la ciudad de Chaitén se registraron una gran cantidad de sismos de baja y mediana intensidad, lo que tuvo en alarma a los pobladores de la zona pues no estaban acostumbrados a estos hechos y tenían temor de que ocurriera algún sismo mayor o que alguno de los volcanes cercanos, el Corcovado ubicado al sur de la ciudad o el Michinmahuida al norte, entraran en erupción.
El 2 de mayo, pasadas las 0:30 hrs (UTC-4), un gran estruendo junto con una fuerte sacudida despertó a los habitantes de Chaitén y alrededores, quienes con la oscuridad vieron y sintieron un volcán entrar en erupción, el Chaitén, un volcán que se creía extinguido.
El Gobierno envió barcos para evacuar a los habitantes de la zona en peligro a otras ciudades a albergues y casas de familiares. Personal del Ejército que se encontraba en la zona trabajó despejando caminos y puentes tapados por las cenizas para usar las vías terrestres, ya que las vías aéreas a Chaitén estaban obstruidas por la ceniza que podría dañar los motores de aviones y helicópteros.
De esta forma, en la noche del 2 de mayo Chaitén parecía un pueblo "fantasma" por el traslado de la mayoría de sus habitantes a zonas seguras, quedando menos de 1.000 personas en la ciudad esperando salir al día siguiente. El sábado 3 de mayo siguió la evacuación mientras los sismos se reducían dando la impresión de retomar la calma y la lluvia que cayó limpió un poco la ceniza que cubría la zona ayudando principalmente al ganado. En esa noche, la nube volcánica brindaba un espectáculo de luces por los rayos que se producían.
El domingo 4 de mayo la zona amaneció mas despejada.
SithWolf
2 comentarios: (+add yours?)
Qué foto más chula!!! Sí que da miedo, sí... pues yo no me había enterado de lo que había pasado ¿ha salido en la tele? Si es que vivo en la inopia :D
La foto es a la vez hermosa y terrorifica.
No importa lo que hagamos, ni los recursos tecnológicos que tengamos; la naturaleza al final siempre se saldrá con la suya.
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