Mis fotografías favoritas de las vacaciones

Son un total de 20, que le vamos a hacer, son muchas y me ha costado mucho hacer la selección. Pero estas son las que más me gustan. El único orden que siguen es el cronológico, espero os gusten.

Esta es de un puerto de montaña en Transilvania. En lo más alto de la carretera crecían orgullosas las montañas, aún sabiendo que el Sol siempre será más alto que ellas.


Como la vida misma. Unas escaleras cuesta abajo donde lo único que se ve sin lugar a dudas es donde estás, y el futuro cada vez está más desenfocado.


Uno de los maravillosos pueblos de Transilvania, sin más.


Un ejemplo de las iglesias fortificadas protegidas por la UNESCO.


En el interior de la iglesia, una biblia alemana presidía la iglesia. Aproveché que el libro estaba abierto para hacer esta foto.


Cigüeñas. A veces vale la pena subir o bajar el encuadre para dejar que respire la fotografía o ahogarla en un montón de detalles.


Yo sólo hice la foto. El mérito es de quien talló el cristo, ofreciendo unas sombras geniales.


Unos gatos jugando entre tablones de madera. Me gusta el tablón de la izquierda con una marca con forma de ojo de gato.


Lo que comentaba sobre la saturación de información. Líneas y más líneas. Es difícil equilibrar estas fotos pero cuando te sale bien, aunque sea de pura suerte, puedes estar contento.


Iglesia. Típica foto "on the road", a veces salen sin moverse y todo.


El olfato del bosque. O lo que es lo mismo, como un árbol crece de forma caprichosa. ¿No os parece una nariz?


Bosque. Cuidado con el árbol caido, daba miedo como se quejaba. Parecía que de un momento a otro iba a caer, empujado por el viento.


No es más que un valle. De esos valles tan hermosos que encontré en Transilvania.


A veces sucede algo y tienes la cámara a punto. Una cabra montesa cae en medio del camino y deja fotografiarse.


Me impresionaron mucho los estratos de las montañas. En esta foto, me gustó como la naturaleza creó estas terrazas para su jardín caprichoso.


El Rey de la Montaña vigilante.


Cuando vi por primera vez el castillo Peles disfruté de una noche con una atmósfera mágica, y estando en Transilvania la sugestión estaba servida. La foto no hace justicia a ese momento, pero verla hace que lo recuerde.


Estas estatuas llevan siglos enfadadas, discutiendo cual de las dos es más hermosa, no hay manera de reconciliarlas.


El Rey nos presenta su castillo.


Un infante con los ojos vacíos. Me gustaba como se creaban las sombras en esta escultura.


Naturaleza y hierro forjado.


El merecido descanso.


Una niña con su peluche. Me gusta robar fotografías cuando parece que no hay nadie mirando.


Pues ya está, espero que os haya gustado... sí? bueno, vale... os pongo un bonus track.


LA VAGINA DE PIEDRA!!!


SithWolf

4 comentarios: (+add yours?)

Brie dijo...

Peaso gualpeipers :D Cuando nos las enseñastes no te pusistes tan artístico, eh???? Pero son muy chulas, te recuerdo que "te contraté" para un curso de fotografía, snif :D

Gaby dijo...

Que barbaro, que afortunado eres al haber visitado un sitio tan hermoso... Y todas las fotos son en verdad muy buenas. Me han encantado la de la iglesia, las del bosque y la vista de pueblo; y ni que decir del Cristo, ¡¡Es en verdad precioso!. :D

P. Ramos "Poncho" dijo...

Uy no conocía tu faceta como fotógrafo de exteriores :D

Muy wenas fotos y preciosos lugares.

Salu2

Yolanda dijo...

Menudas fotos!!

El lugar es precioso, aunque no vamos a quitar mérito al fotógrafo...